Thursday, September 14, 2006

DOS DESTINOS Y UN SOLO CAMINO

Hoy tengo la satisfacción de presentar el trabajo realizado por UNA AMIGA que siente desde su interior la necesidad de ayudar y que siempre puedes contar con su colaboración mas desinteresada. Comprensiva y llena de ternura, amiga de de sus amigos y con gran experiencia en el tema de ayuda a los más necesitados sobre todo de los niños.

Mi amiga Patricia me describe a continuación su viaje en peregrinación durante siete días, en compañía de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago – ACASAN - de Fuenterroble de Salvatierra en Salamanca.
“El albergue de Fuenterroble de Salvatierra, en la provincia de Salamanca, fue la primera infraestructura del Camino de Santiago de la Ruta de la Plata. Una iniciativa que partió de la parroquia de la localidad que, desde el primer momento, cedió sus instalaciones para alojar a los peregrinos convirtiendo la Rectoral en la Casa del Peregrino. José Maria Blas, el cura Blas de Fuenterroble, recuerda aún el primer peregrino que pasó haciendo el camino a finales de la década de los 80. Años después, decidió que era necesario buscar un lugar de acogida para el peregrino que venia haciendo el camino de Santiago.

Fue en 1994 cuando la Rectoral de Fuenterroble se convierte en el primer albergue de la provincia de Salamanca en la vía de la plata. En aquella época, el Camino Francés la arteria Jacobea más importante, comenzaba a poner en marcha toda una infraestructura.

En el albergue de Fuenterroble nacía el espíritu y el ambiente Jacobeo, aunque eso si, con menos peregrinos que, sin embargo, agradecían una puerta abierta, una mesa puesta y una cama donde poder dormir.

Hoy son centenares los peregrinos que se alojan y descansan en Fuenterroble y la capacidad de las instalaciones puede acoger a más de sesenta personas. Este albergue se ha convertido en el epicentro del camino de Santiago del sur, en su recinto se han celebrado congresos Jacobeos y numerosas programaciones culturales y espirituales “arrieros somos y en el camino nos encontraremos”, reza el lema de esta actividad que consiste en la recreación de carros tirados por burros y mulas con los que recorren distintos caminos y a cuya cita acuden cientos de personas de toda España.

Esta marcha tiene un carácter reivindicativo, cultural y de unión entre los pueblos de España con Santiago peregrino como abanderado de ese camino, que inicio hace 2.000 años, característica esta última que confiere cierto carácter religioso, pero otro de los objetivos de esta marcha creada hace 6 años es la de dar a conocer los lugares más bello de la geografía española. El campamento tiene también una version cultural, con talleres para los más pequeños. . . . . . etc.

El año pasado en concreto recorrimos los Arribes del Duero por el antiguo ramal de San Francisco, por el que a lo largo de siglos pasaron los peregrinos Santiagueños, e hicimos un homenaje a Juanjo, sacerdote asesinado en el 2003 “el hermano de los pobres y apóstol de Águeda y el Yeltes” que quería promover la recuperación del camino Franciscano.
Este año unas 150 personas llegadas de toda España, con el padre Blas como promotor de la ruta, una vez más, por ser año santo Lebaniego, nos hemos encaminado hacia el monasterio de Santo Toribio, y hemos recorrido las preciosas aldeas de la montaña Cantabra durante una semana: Fontibre, Reinosa, Potes, Cabo de Ajo, Güemes, Santander capital. . . . . han sido entre otros lugares de estancia y paso.

La peregrinación ha durado un total de siete días, del 7 de Agosto lunes a día 13 domingo. El día 11, viernes, fue nuestra llegada a Santo Toribio para venerar el Lignum Crucis y para agradecer a Santo Toribio que propusiera a Santiago como patrono de España, es precisamente esta cruz el “Lignum Crucis” la reliquia que proporciona a Liébana la importancia religiosa, que le permite ser uno de los cuatro únicos años jubilares del mundo. Así, en todo el mundo solamente existen cuatro años jubilares, siendo el Lebaniego el menos conocido y rural de todos, el resto se sitúa en ciudades bien conocidas como Roma, Jerusalén y Santiago.
El año jubilar en Cantabria se celebra cuando la fiesta de Santo Toribio, el día 16 de abril, cae en domingo. Para ganarse el perdón, los peregrinos deben traspasar la denominada “puerta del perdón”, es una puerta románica, decorada por Santos Lebaniegos y con una reproducción en bronce del “Lignum Crucis”. Esta cruz pasa por ser el mayor trozo de la cruz donde murió Cristo que se conserva en el mundo. Según la leyenda, la cruz pudo llegar al monasterio con los restos de Santo Toribio de Astorga, tras la invasión del 711. Según la tradición cristiana proviene de uno de los trozos que Santa Elena hizo de la cruz donde murió Cristo. Troceada en tres partes, uno fue enviado al Emperador Constantino, otro a Roma, quedando el tercero en Jerusalén. Las continuas invasiones y saqueos a los que fue sometido la ciudad Santa, hizo que Santo Toribio de Astorga pidiera permiso al Papa León I, para trasladar las reliquias hasta Astorga. La reliquia se guarda en un estuche de plata y corresponde al brazo izquierdo de la cruz. A mediados del siglo XVI fue serrada en dos y puesta en forma de cruz, quedando una abertura por donde los peregrinos besan la reliquia.

Nuestra marcha la abría un carro con una replica del Lignum Crucis”, seguido por otro que portaba una talla de Santiago Apóstol, tras ellos otros seis carros tirados por burros y mulas, cada uno de ellos representando a uno de los gremios, que a lo largo de los siglos, han transitado por las calzadas y vías españolas.

Pretendemos llevar la cultura a zonas rurales, en grave riesgo de despoblación, y acercar a los urbanitas a un medio rural, que alberga grandes tesoros humanos, paisajísticos y culturales.

Para Blas Rodríguez Boyero, el párroco de Fuenterroble de Salvatierra, en Salamanca, desde donde partió la expedición y llego a su fin, este campamento es un homenaje a aquellos que durante siglos dejaron huella transitando estos caminos, en comunión entre pueblos y moradores, con el deseo de fortalecer las relaciones entre todos".El año jubilar en Cantabria se celebra cuando la fiesta de Santo Toribio, el día 16 de abril, cae en domingo. Para ganarse el perdón, los peregrinos deben traspasar la denominada “puerta del perdón”, es una puerta románica, decorada por Santos Lebaniegos y con una reproducción en bronce del “Lignum Crucis”. Esta cruz pasa por ser el mayor trozo de la cruz donde murió Cristo que se conserva en el mundo. Según la leyenda, la cruz pudo llegar al monasterio con los restos de Santo Toribio de Astorga, tras la invasión del 711. Según la tradición cristiana proviene de uno de los trozos que Santa Elena hizo de la cruz donde murió Cristo. Troceada en tres partes, uno fue enviado al Emperador Constantino, otro a Roma, quedando el tercero en Jerusalén. Las continuas invasiones y saqueos a los que fue sometido la ciudad Santa, hizo que Santo Toribio de Astorga pidiera permiso al Papa León I, para trasladar las reliquias hasta Astorga. La reliquia se guarda en un estuche de plata y corresponde al brazo izquierdo de la cruz. A mediados del siglo XVI fue serrada en dos y puesta en forma de cruz, quedando una abertura por donde los peregrinos besan la reliquia.

Nuestra marcha la abría un carro con una replica del “Lignum Crucis”, seguido por otro que portaba una talla de Santiago Apóstol, tras ellos otros seis carros tirados por burros y mulas, cada uno de ellos representando a uno de los gremios, que a lo largo de los siglos, han transitado por las calzadas y vías españolas.

Pretendemos llevar la cultura a zonas rurales, en grave riesgo de despoblación, y acercar a los urbanitas a un medio rural, que alberga grandes tesoros humanos, paisajísticos y culturales.

Para Blas Rodríguez Boyero, el párroco de Fuenterroble de Salvatierra, en Salamanca, desde donde partió la expedición y llego a su fin, este campamento es un homenaje a aquellos que durante siglos dejaron huella transitando estos caminos, en comunión entre pueblos y moradores, con el deseo de fortalecer las relaciones entre todos.